La Confederación Española de Sindicatos Médicos (CESM) ha mostrado su apoyo a la Asociación de Médicos de Sanidad Exterior (AMSE), que representa a un 80% del colectivo, por la crítica situación de precariedad e inseguridad laboral y jurídica por la que están atravesando en los últimos años, una situación que se hace especialmente complicada en los periodos de alta demanda. 

Tras varias reuniones mantenidas, el presidente de AMSE, José Francisco Gallegos, ha trasladado a los responsables de CESM cuáles son las condiciones laborales de los médicos de Sanidad Exterior y sus principales reivindicaciones. Conviene recordar que estos profesionales son la parte del cuerpo de Médicos Titulares del Ministerio de Sanidad en la periferia y están destinados en las dependencias de Sanidad de las Delegaciones y Subdelegaciones del Gobierno en cada provincia española con puerto o aeropuerto internacional, con un total de 29 dependencias. Se encargan, por tanto, de cuestiones como la vacunación internacional, el control de aspectos higiénico sanitarios en personas y medios de transporte internacional y el control de alertas y emergencias sanitarias en las fronteras. 

Gallegos ha explicado a CESM que uno de los principales problemas es el número de plazas que no se cubren y la disminución del número de éstas; si en 2009 había 76 funcionarios fijos ocupando 94 plazas en RPT, actualmente hay 49 funcionarios con plaza fija cubriendo las 63 plazas en RPT para toda España. Así, además de que no se crean nuevas plazas, en las últimas OPEs convocadas (casi 165 y 196 plazas) no se ha cubierto ni un cuarto de ellas, mientras que en la periferia han sido unas 20 las incorporaciones reales. 

Los condicionantes laborales, como un complemento de productividad "irrisorio", hacen que el trabajo de médico de Sanidad Exterior resulte cada vez menos atractivo  

Esto se suma a otra serie de condicionantes laborales que hacen que el trabajo como médico de Sanidad Exterior resulte cada vez menos atractivo, como son un salario que no supera el nivel 26 de complemento de destino para Jefe de Servicio, que no cuentan con el complemento de carrera profesional, que su complemento de productividad es irrisorio (entre 50 y 1.000 euros anuales) o que están obligados a realizar guardias telefónicas localizadas a cualquier hora y día del año que se remuneran con 140 euros brutos a la semana (suponen disponibilidad telefónica y por correo para atender el puerto o aeropuerto de referencia y no estar a más de una hora por si se precisa presencialidad). 

El presidente de AMSE señala que a estas ya de por sí insostenibles condiciones laborales se les suman una muy mala organización del trabajo en las dependencias, un sistema de teleasistencia para pasar consulta de los centros con mayor déficit de personal por parte de aquellos que en teoría tendrían menor carga de trabajo o las Instrucciones o Planes para el periodo estival que desde 2017 implantan la exigencia de un máximo de 10 días de espera para conseguir cita para vacunación internacional, lo que a su vez supone cargas de trabajo inasumibles, horarios diferentes a todos los demás funcionarios de la Administración General del Estado (AGE) en este periodo estival, suspensión o limitación de vacaciones y anulación de medidas de conciliación y flexibilidad, entre otros. 

Ante esta complicada situación, desde CESM se ha querido mostrar todo el apoyo a los médicos de Sanidad Exterior y apoyar sus reivindicaciones, que pasan, en primer lugar, por reclamar que las principales competencias en esta materia vuelva a asumirlas el Ministerio de Sanidad, ya que dependen funcionalmente de éste pero orgánicamente del Ministerio de Política Territorial y Memoria Democrática, responsable de cuestiones como la dotación de plazas, salarios, recursos materiales, PRL, compra de vacunas, etc. La falta de coordinación y entendimiento entre ambos, señala AMSE, está complicando aún más las condiciones laborales de estos profesionales, por lo que la Confederación insta a Sanidad a trabajar de manera conjunta para buscar soluciones consensuadas. 

Además, los médicos de Sanidad Exterior reclaman una dotación adecuada de todas las áreas con un mínimo de dos médicos en cada una y, a partir de ahí, una plantilla dimensionada en función de la carga de trabajo de cada dependencia; refuerzos en periodos puntuales de mayor actividad como el periodo estival o cuando se declaren alertas sanitarias internacionales; un mayor atractivo económico para las plazas de médicos de Sanidad Exterior de la AGE; la inclusión de modo efectivo de estos médicos dentro del Sistema Nacional de Salud, permitiendo que puedan participar en los sistemas de información autonómicos y una dotación efectiva de los puntos de entrada con capacidad de atención 24 horas de emergencias de Salud Pública, para cumplir con el compromiso de garantizar el control sanitarios de medios de transporte internacional en nuestras fronteras. 
 

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