Actualmente, ninguna comunidad garantiza al 100% que niños y adolescentes sean atendidos por médicos y enfermeros especializados en Pediatría en los centros de salud de nuestro país. Son, recuerda un manifiesto conjunto firmado por la Asociación Española de Pediatría (AEP), la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap), la Sociedad Española de Pediatría Extrahospitalaria y Atención Primaria (SEPEAP), la Asociación Española de Enfermería Pediátrica (AEEP), la Federación Española de Asociaciones de Enfermería Pediátrica (FEDAEP) y la Sociedad Española de Enfermería Neonatal (SEEN), los profesionales “específicamente formados” para tratar la salud infantil, y por eso reivindican su total implantación.
“La salud de los niños, niñas y adolescentes es de especial importancia: un buen estado de salud en la infancia repercute directamente en una vida adulta más saludable, con menores costes sanitarios y una mejor calidad de vida para todos”, asegura el manifiesto, que pide que la Pediatría de Atención Primaria sea una “prioridad inaplazable” para los responsables del Sistema Nacional de Salud “y un derecho para todos los niños, niñas y adolescentes”. “Exigimos a las administraciones que garanticen el acceso equitativo y universal a la atención pediátrica en los centros de salud”, reivindican los médicos y enfermeros especialistas.
Entre otros muchos aspectos, como reconocer que esta atención especializada es “esencial” para hacer efectivo su derecho a “crecer y desarrollarse en buena señal”, el manifiesto señala que menores atendidos en el primer nivel asistencial por pediatras y enfermeras pediátricas de Atención Primaria reciben una atención más adecuada a su edad y obtienen mejores resultados de salud que aquellos asistidos por otros profesionales. Así lo demuestran, afirman, las “revisiones sistemáticas” de más de mil artículos científicos publicados hasta la fecha.
Prescripción ajustada de medicamentos, vacunación eficaz, diagnóstico precoz, seguimiento de patologías crónicas, eficiencia diagnóstica o mejora de la adherencia a los protocolos para la seguridad en la infancia y la disminución de los efectos adversos en los pacientes son algunos de los beneficios que obtienen los pequeños atendidos por profesionales sanitarios especializados. De igual manera, las familias de los menores confían “de manera mayoritaria” en los pediatras y enfermeras pediátricas de Atención Primaria, y prefieren que sus hijos e hijas sean atendidos por estos profesionales cuando tienen que acudir a los centros de salud.
Dicha preferencia, señala el manifiesto, quedó demostrada en la recogida de más de 215.000 firmas en centros de salud en defensa del modelo pediátrico en 2018 y en las manifestaciones que se han sucedido en los últimos años cuando algún barrio o localidad se han quedado sin pediatras. Y es que este es un fenómeno que, denuncian las asociaciones, afecta en mayor o menor medida a todas las comunidades autónomas “y es cada vez más habitual”.
IGUALDAD DE CONDICIONES
En Europa hay, a día de hoy, más de 25.000 pediatras de Atención Primaria en 19 países, según los datos de la European Confederation of Primary Care Pediatricians (ECPCP), y en aquellos donde la asistencia por parte del pediatra de Atención Primaria no está garantizada, reitera el manifiesto, se producen situaciones de falta de equidad, “algo que podría darse en España si no se salvaguarda el modelo actual que ha demostrado ser más efectivo y eficiente para la salud infantil y adolescente a largo plazo”.
“Si el pediatra y la enfermera pediátrica de Atención Primaria son los profesionales cuya intervención es más efectiva y las familias los prefieren, contar con la garantía de ser atendido por estos especialistas en el centro de salud favorece la igualdad de oportunidades: cuando la atención pediátrica en el primer nivel de asistencia no está garantizada, sólo las familias con más recursos económicos llevan a sus hijos e hijas a consultas privadas de pediatría de Atención Primaria, y los hijos de familias con menor poder adquisitivo no tienen acceso. Por tanto, no garantizar el acceso a la pediatría de Atención Primaria supone un recorte de derechos y generaría inequidad entre los menores que pueden acceder a la asistencia pediátrica y los que no”, sentencia el manifiesto conjunto.
*Los contenidos de ConSalud están elaborados por periodistas especializados en salud y avalados por un comité de expertos de primer nivel. No obstante, recomendamos al lector que cualquier duda relacionada con la salud sea consultada con un profesional del ámbito sanitario.